Los perritos tienen su propio lenguaje, que les permite comunicarse entre ellos, pero también con nosotros. Sin embargo, a veces es complicado entender lo que nuestro perro intenta decirnos.
En este artículo, te explicaremos por qué tu perro te lame.
Es un comportamiento natural en los perros, especialmente cuando son cachorros. De hecho, la lengua de los perros es un órgano de percepción que les permite descubrir su entorno y comunicarse con sus congéneres. También les permite regular su temperatura. Como la lengua tiene muchos vasos sanguíneos, les ayuda a disipar el calor, por lo que jadean después de hacer ejercicio.
Como ocurre a menudo, hay que observar en qué circunstancias se produce el comportamiento para determinar su significado.
En general, cuando un perro lame es una interacción positiva, pero puede tener diferentes significados:
Si tu perro te lame especialmente en la cara, significa que está tratando de llamar tu atención. Es una interacción positiva contigo y así también expresa su alegría de estar en tu compañía.
Después de una agresión, el perro puede lamerse de manera insistente para tranquilizarse. De hecho, lamerse disminuye el estrés y provoca una emoción positiva.
Por lo tanto, lamer es en su mayoría un comportamiento bastante positivo, tanto para quien lo da como para quien lo recibe. Pero en algunos casos, también puede revelar un problema de salud.
Si tu perrito lame una zona particular de su cuerpo de manera insistente, puede significar que le duele esa zona. Al lamerse en ese lugar específico, intenta aliviar su dolor.
Algunos perros se lamen de manera excesiva y muy frecuente. Esto se llama dermatitis por lamido y también se observa una pérdida de pelo. El perro se lame con mucha frecuencia para calmarse, buscando la sensación de tranquilidad que el lamido le proporciona.
En estos dos últimos casos, no dudes en consultar a tu veterinario para determinar la causa del problema y encontrar una solución.
Depende de ti determinar si este comportamiento te molesta o no. Si deseas detener el lamido, aquí hay algunas cosas que puedes hacer:
Si estos dos métodos no funcionan, puedes aplicar limón en tu piel, en los lugares donde tu perro te lame. A los perros no les gusta el limón, por lo que será menos tentado de lamerte.
Sea cual sea el método que elijas, debes ser coherente. No debes permitir que tu perro te lama en un momento y luego prohibirle en otro, ya que no lo entendería.
Por último, a menudo se piensa que la saliva del perro tiene propiedades antisépticas y cicatrizantes, pero esto es falso. De hecho, dejar que tu perro lama una herida puede favorecer el desarrollo de microbios y bacterias.
Ahora sabes todo sobre este comportamiento muy común en nuestros perritos. Esperamos que esto te permita comprender mejor a tu perro y comunicarte mejor con él.
¡Todos deberían poder disfrutar del afecto de un perrito!
¡Hasta pronto en Préstame Tu Perrito!
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